El consumo es una forma de vida de nuestra sociedad actual y desde los años 70 se ha instaurado en la vida cotidiana de las personas.
El consumo se ha convertido en una cultura común que nos induce a saciar deseos y necesidades que el entorno crea. Esta cultura se desarrolla en medio de un mundo desigual y una estratificación social evidente que impide el crecimiento de muchos sectores de la sociedad.
El consumo se ha convertido en una cultura común que nos induce a saciar deseos y necesidades que el entorno crea. Esta cultura se desarrolla en medio de un mundo desigual y una estratificación social evidente que impide el crecimiento de muchos sectores de la sociedad.
Cada vez se tiende más a lo efímero, al placer momentáneo, desde la compra de bienes hasta las relaciones personales.
Las marcas de consumo son los elementos principales que componen la ley de la oferta y la demanda así como la comunicación comercial. Son las que en realidad han marcado un nuevo estilo de vida y formas de actuar hedonistas propias de la sociedad actual.
El estudio sociológico en este aspecto viene motivado por los nuevos estilos de vida y la influencia cultural que genera el consumismo, de la misma manera que los expertos en publicidad y marketing estudian cómo dar cabida a sus productos y servicios.
Somos parte de una actividad que creemos común y normal pero realmente ha sido creada e impuesta. La publicidad es una de las partes que sustenta este sistema consumista.
La publicidad como balcón de las marcas emite unos valores que van asociados a ellas que están previamente meditados.
Los que trabajamos en este territorio tan hostil muchas veces tenemos dudas y sentimos que estamos apoyando un sistema desigual e injusto.Pero no debemos ver el vaso medio vacío , debemos actuar y aprovechar la capacidad comunicativa para desarrollar una sociedad más justa.
Se puede guiar esa gran influencia de la publicidad para construir un mundo mejor. Somos creativos, o al menos nos hemos formado en ello, así que seguro que encontramos la manera de comunicar para armonizar las diferencias latentes en nuestra sociedad.
Paula Comes Rodríguez.
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